El Foro por la Paz y el Mediterráneo ha inaugurado sus XI Jornadas de Seguridad y Defensa en la ETS de Arquitectura de la Universidad de Málaga, en un acto que ha contado con el director del Foro por la Paz, Rafael Vidal, el director de la ETS de Arquitectura de la UMA, Carlos Rosa y el secretario regional de Vivienda y Urbanismo del Gobierno de Chile, Fernando de Haro, entre otras personalidades.

Fernando de Haro ha sido el encargado de pronunciar la conferencia inaugural, que ha versado sobre un plan de vivienda y urbanismo para las clases más desfavorecidas desarrollado por el Gobierno de Chile los últimos cuatro años. El ámbito de actuación de dicha acción ha sido la XII Región de Chile (Magallanes y Antártica) y ha supuesto la entrega de 4.200 viviendas, 6.000 rehabilitadas y 18 barrios recuperados.

Los objetivos de dicha actuación, en palabras del arquitecto chileno, “fueron superar el déficit cualitativo y cuantitativo y la equidad territorial”. Este concepto hace referencia a que no prime la evaluación económica sobre la social, de manera que los planes de desarrollo no sólo tengan un criterio de rentabilidad económica sino también social. Los barrios regenerados han buscado “un criterio de máxima integración de la población” de manera que no se creen guetos de población desfavorecida o áreas residenciales de clases socialmente favorecidas.

Uno de los puntos clave de este plan habitacional ha sido el propio diseño de las viviendas, que ha sido cuidado al máximo incluyendo los espacios públicos como miradores, parques de niños y jardines. “El diseño eleva la calidad de vida”, de manera que se recabó la opinión de los grupos desfavorecidos beneficiarios del plan, para conseguir un efecto integrador que “redundase en la seguridad y el bienestar de la comunidad”.

Este desarrollo ha tenido como telón de fondo un profundo cambio legislativo experimentado en Chile bajo el gobierno de la presidenta Bachelet, lo que ha permitido realizar una remodelación profunda del tejido social chileno más expuesto a los riesgos de la pobreza y el desarraigo.

En este sentido, hay que hacer constar que Málaga colabora con las Naciones Unidas en los Planes de Desarrollo (PENUD), y en la Alianza Mundial de las Ciudades contra la Pobreza, siendo precisamente el adecuado urbanismo, con servicios esenciales de abastecimiento y saneamiento de agua, energía y gestión a través de la información de los recursos locales, las claves de estos planes.

La celebración de las XI Jornadas servirá para analizar el nuevo orden mundial y su incidencia en el arco mediterráneo y harán de Málaga un referente internacional en todo lo concerniente a seguridad, entendida en su mayor amplitud: económica, jurídica, cultural o defensiva.