La neuroplasticidad centra la segunda de las conferencias en homenaje a Cajal
Marcelo Berthier, del Centro de Investigaciones Médico Sanitarias de la UMA, explica la capacidad del cerebro para adaptarse a los estímulos
Categoría: portada, Medicina
El Salón de Actos del Rectorado acogió de nuevo otra de las citas divulgativas organizadas con motivo de la exposición ‘Cajal y las Neuronas’, abierta al público en el mismo edificio hasta el 24 de mayo.
La conferencia, con el título ‘El cerebro no es inmutable: cómo lo vemos con neuroimagen’, fue presentada por la vicerrectora de Investigación y Transferencia, María Valpuesta, y pronunciada por Marcelo Berthier, profesor de la Universidad de Málaga y neurólogo especializado en neuropatías relacionadas con el lenguaje y la comunicación.
Durante su intervención, el profesor Berthier analizó el pasado, presente y futuro de la investigación sobre la llamada “plasticidad cerebral” con un interesante recorrido a lo largo de varios estudios especializados en distintas áreas cerebrales y en los que se ha constatado, entre otras conclusiones, que el volumen cerebral con el que se nace incide directamente en la capacidad de adquirir conocimientos. El neurólogo explicó además cómo la estructura cerebral es sensible y aumenta en horas o días su tamaño en las regiones que han sido “entrenadas” para una determinada tarea. “Rafa Nadal, diestro de nacimiento y entrenado desde pequeño para golpear de izquierda, es un claro ejemplo de cómo lo epigenético modifica lo genético”, añadió Berthier.
Por otra parte, puso de manifiesto causas, como el analfabetismo, que pueden convertirse en variables a tener en cuenta a la hora de calcular las posibilidades de padecer y contrarrestar el alzhéimer. Otro de los temas de la tarde fue la neuroimagen como técnica para identificar con precisión las alteraciones que ocurren en el cerebro y, con ello, aprender a modelarlas con distintas estrategias de intervención, por ejemplo, la práctica intensiva de una tarea. En esta línea, el investigador reconoció que, tanto la resonancia magnética cerebral funcional, como la tomografía por emisión de positrones, “son auténticas ventanas al cerebro vivo en acción que permiten conocer de cerca su fascinante capacidad de adaptarse a las contingencias de un mundo en continuo cambio”.
Asimismo, el profesor, premio ‘SEN Alzheimer’ de la Sociedad Española de Neurología en 2011, mencionó alguno de los avances obtenidos por su grupo en el terreno las lesiones cerebrales causantes de déficits en la expresión oral y escrita. Sobre ello, destacó la obtención de resultados positivos en el uso de acetilcolina para el tratamiento de pacientes de afasia, un neurotransmisor especialmente presente en operaciones relacionadas con la memoria.
Ciclo de conferencias
Junto a esta cita, se completará la programación de actividades el 22 de mayo, también a las 19:30, con ‘Tras las huellas de Cajal’, presentada por el doctor Antonio Campos Muñoz, catedrático de Histología de la Universidad de Granada y presidente de la Real Academia de Medicina de Andalucía Oriental.
La exposición
“Cajal y las Neuronas” abrió sus puertas la semana pasada en Málaga. La muestra, organizada por la Real Academia de Medicina de Andalucía Oriental, el Parque de las Ciencias de Granada y la Universidad de Málaga, tiene por objeto divulgar la importante aportación española al conocimiento del sistema nervioso, junto a las bases conceptuales y estructurales en las que se asienta la moderna investigación en neurociencia. La exposición, que puede visitarse de lunes a sábado en horario de 11:00 a 14:00 horas y de 18:00 a 21:00 horas, muestra una síntesis de la obra de Cajal, así como, la mentalidad y el contexto biográfico que la hizo posible. En la misma se exponen instrumentos, libros y materiales vinculados a su investigación científica y a la de sus discípulos, y se recoge la repercusión universal que tuvieron -y aún hoy tienen- dichos hallazgos. La muestra se completa, además de con el ciclo de conferencia, con visitas guiadas que aportarán una mejor comprensión sobre Cajal y la neurociencia.