Este viernes cientos de capitales en toda Europa han celebrado al unísono La Noche de los Investigadores y Málaga ha sido una de ellas. En la actividad, coordinada a nivel andaluz por la Fundación Descubre, han participado 15 centros e instituciones de investigación de Andalucía, entre las que se encuentra la Universidad de Málaga (UMA), y tiene como objetivo principal propiciar el acercamiento entre el público y los expertos de un modo informal y divertido. Se trata de poner de relieve el impacto positivo de su trabajo en nuestra vida cotidiana y de promover con ello las vocaciones de los futuros científicos.

En la UMA, las ETSI de Informática y de Telecomunicación acogieron anoche esta iniciativa que reunió a una veintena de investigadores con cerca de 500 participantes distribuidos entre las mesas temáticas o microencuentros, talleres prácticos y la visita guiada al Museo de Informática.

En el acto de presentación estuvieron presentes autoridades de los distintos organismos e instituciones implicados a nivel local y autonómico en el evento, e intervinieron Adelaida de la Calle, rectora de UMA; y José Sánchez Maldonado, consejero de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía.

En su intervención, la rectora presentó el programa y valoró como “un testimonio muy importante de apoyo a la ciencia en un momento como el actual” la celebración de La Noche, tanto en Málaga como en las otras 350 ciudades europeas que se sumaron a la cita. Asimismo, De la Calle agradeció la participación a todos los investigadores, “por su trabajo y por prestar su tiempo a actividades como esta, en la que sin duda, añadió, se pone en valor el conocimiento generado en la Universidad”. Sánchez Maldonado, por su parte, cerró el acto inaugural subrayando la importancia de eventos como este “para apreciar, gracias a sus propios protagonistas, el impacto de la I+D+i en la ciudadanía”.

Microencuentros

En la sede de la Universidad se registró una afluencia de casi medio millar de personas. De ellos, 150 participantes asistieron a 10 mesas temáticas en las que cada investigador dio a conocer sus avances y debatió con los presentes sobre su ámbito de trabajo. Son los llamados ‘Microencuentros’ y trataron sobre ámbitos como el envejecimiento saludable, los riesgos laborales, el ciberacoso, la integración de cerebro y tecnología, pasando por la faceta creativa de los ordenadores o la química de los productos naturales, entre otros.

En la mesa de los profesores José Antonio Arjona y Oswaldo Trelles, del departamento de Arquitectura de Computadores, los invitados se adentraron en el mundo de la bioinformática y conocieron la importancia que la computación ha tenido en el progreso de campos como la genética. Continuando con la tecnología, el catedrático Francisco Vico, explicó la gestación y funcionamiento de IAMUS, un ordenador capaz de componer música clásica por sí solo, y con este profundizó en la faceta creativa de los ordenadores. La charla con la doctora Gómez de la Torre, en cambio, trató sobre los materiales de la construcción ecológicos y explicó cómo en su laboratorio se están desarrollando nuevos materiales que emiten en su producción hasta un 35% menos de dióxido de carbono que los actuales. Amelia Díaz, investigadora del departamento de Química Orgánica, presentó la mesa “Productos naturales y análogos de interés biológico”, en la que estuvo acompañada, además, por la vicerrectora de Investigación, y a su vez, catedrática de Química Orgánica, María Valpuesta.

Por otro lado, la salud, los riesgos laborales y la integración cerebro-tecnología fueron las temáticas de los microencuentros de los profesores Rubio Moreno, Morales Asencio y García Linares, respectivamente. Este último, director de la empresa Brain Dynamics, centró su charla en la fusión del conocimiento del cerebro y tecnología como solución a ciertas enfermedades neurológicas y psiquiátricas. Rubio Moreno, profesor de la Cátedra de Prevención y Responsabilidad Social Corporativa de la UMA, detalló a su público los diferentes riesgos laborales según el sector, así como los mejores modos para prevenir, tanto los actuales, como los de los sectores emergentes. En su intervención, Morales Asencio, del Departamento de Enfermería y Podología, respondió a varias cuestiones relacionadas con las claves para un envejecimiento saludable o cómo evitar enfermedades crónicas.

Las Ciencias Sociales también estuvieron presentes. Es el caso de las profesoras Isabel Bernedo y Mª Jesús Fuentes, del departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación, que aportaron su investigación en el ámbito del acogimiento familiar como forma de mejorar la vida de niños y niñas. La doctora Ángela Muñoz, del mismo departamento, puso sobre la mesa varias perspectivas sobre un tema relacionado íntimamente con el uso de las nuevas tecnologías y las redes sociales: el ciberacoso. Por su parte, Jesús Canto, de Psicología Social, Antropología Social, Trabajo Social y Servicios Sociales, inició su microencuentro con una interesante pregunta: ¿hay diferencias entre los hombres y las mujeres en el modo en el que experimentan los celos?

Talleres y visita al Museo de Informática

Como novedad, este año se han organizado para el resto de visitantes dos talleres en los que se llevaron a cabo demostraciones prácticas para acercar al público la parte más tangible de la ciencia. Uno de ellos fue ‘Iniciación a la robótica’, organizado por la ETSI de Telecomunicación e impartido por la profesora Cristina Urdiales, que mostró mediante robots construidos con Lego los primeros pasos en el mundo de la robótica. El otro, que tuvo como tema central el agua, fue organizado por el Centro de Ciencia Principia y, bajo el título ‘Experiencias con Agua’, enseñó a los interesados distintos experimentos relacionados con el líquido elemento, realizando un recorrido su química y explicando, entre otros aspectos, cómo funciona el ciclo hidrológico.

Otra de las actividades paralelas fue la visita al Museo de Informática. En ella los más curiosos hicieron un recorrido guiado por una selección de objetos conservados en la Escuela y conocieron de primera mano las claves y fundamentos de la tecnología de computadores. Asimismo, durante toda La Noche, y gracias a la colaboración de la Oficina de Proyectos Europeo de la Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación de la Universidad, se habilitó un espacio informativo sobre proyectos, financiación y oportunidades laborales de investigación en Europa.

El programa se cerró con un espacio de tiempo dedicado a la charla distendida entre expertos y participantes sobre investigación, ciencia y temas de interés para las personas y colectivos asistentes. En este sentido, además de particulares, acudieron a La Noche varias asociaciones y ONG, como Aldeas Infantiles, Infania, Hogar Abierto, Creando 7, Down Málaga y Ruedas Redondas; junto a alumnos de Secundaria del IES Manuel Romero de Villanueva de La Concepción y al Aula de Mayores de la propia UMA.

En total, más de 700 investigadores en toda Andalucía compartieron mesa y conversación el con casi 10.000 ciudadanos en lo que ha sido el evento simultáneo más importante en el ámbito científico andaluz de los últimos años. Por segundo año consecutivo y al mismo tiempo que en otras 350 ciudades europeas, las ocho provincias andaluzas y Melilla han acogido esta cita divulgativa promovida por la Comisión Europea dentro del VII Programa Marco de Investigación como Researchers’ Night, y que en Andalucía financia la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo y coordina la Fundación Descubre.

Más información: www. http://lanochedelosinvestigadores.fundaciondescubre.es/malaga/

[En el anexo puede consultar información más detallada sobre los microencuentros y actividades paralelas de La Noche de los Investigadores 2013 en Málaga]