Fomentar hábitos saludables de actividad física desde la Educación Física escolar es el objetivo del proyecto de I+D+i del Plan nacional ‘Fit-Person’, en el que participan los investigadores de la Facultad de Ciencias de la Educación de la UMA Iván López y Daniel Mayorga, junto a otros expertos de la UGR y la Universidad Autónoma de Madrid.

Este estudio, que acaba de finalizar, ha tenido una duración de cuatro años y ha contado con una financiación del Ministerio de Ciencia e Innovación y de la Agencia Estatal de Investigación de casi 36.500 euros. Ha estado dirigido por el catedrático de la UGR Jesús Viciana.

La gamificación como metodología

Con este proyecto se ha examinado la percepción de la experiencia de escolares de Educación Primaria -30 estudiantes de 4º a 6º curso- sobre el programa ‘La aventura de Andaluzo’, realizado durante sus clases de Educación Física para fomentar los hábitos saludables de actividad física.

En concreto, este programa innovador, que utiliza la gamificación como metodología, incluía una unidad didáctica intermitente de cinco semanas -tres por semana-, desarrollada durante los diez primeros minutos de clase, en la que el alumnado llevaba puesto todo el día una pulsera de actividad física, específicamente diseñada para menores.

La unidad incluía también estrategias de modificación de conducta adicionales a la pulsera o el uso de un pasaporte saludable, así como de un diario personalizado de la actividad física realizada y, también, establecía objetivos diarios, notificando la consecución de los mismos.

Estrategias más eficaces

A pesar de la evidencia sobre los numerosos beneficios para la salud de la práctica regular de la actividad física en la infancia, lo investigadores de este proyecto, alertan de que los escolares siguen sin cumplir las recomendaciones establecidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). “Esta realidad enfatiza la necesidad de evaluar los programas de intervención y buscar estrategias más eficaces”, señalan.

Información complementaria 

Para ello, según indican estos expertos, disponer de datos cualitativos para conocer con mayor profundidad la opinión de los destinatarios sobre el desarrollo de una intervención orientada a mejorar hábitos de práctica de actividad física proporciona una información complementaria a los tradiciones resultados cuantitativos, que va más allá de la percepción de los participantes, incluyendo datos sobre el tipo de actividad física realizada y el contexto personal y social que rodea su práctica, es decir, “indicios sobre qué es lo que funciona y qué es lo que se puede mejorar”.                                                                                        

De acuerdo con los resultados del estudio, los programas de fomento de la práctica de actividad física que combinen técnicas de modificación de conducta, como la información y sensibilización sobre la actividad física y sus beneficios, junto al uso de las pulseras de actividad física con objetivos progresivos de actividad física diaria,  son considerados por los participantes eficaces para incrementar la cantidad de actividad física, por lo que deberían considerarse como estrategias a tener en cuenta en las intervenciones con escolares.